Estados Unidos

California se opone a orden ejecutiva de Trump y seguiría realizando procedimientos de cambio de género

El Fiscal General de California, Rob Bonta, ha publicado una guía que prohíbe a los hospitales negar tratamientos hormonales a menores, si ofrecen los mismos a pacientes cisgénero de Estados Unidos.

El Fiscal General de California, Rob Bonta, advierte a hospitales sobre la ilegalidad de negar tratamientos hormonales y cirugías de afirmación de género. Foto: Composición LR
El Fiscal General de California, Rob Bonta, advierte a hospitales sobre la ilegalidad de negar tratamientos hormonales y cirugías de afirmación de género. Foto: Composición LR

El Fiscal General de California, Rob Bonta, ha emitido una guía que advierte a los hospitales sobre la ilegalidad de negar tratamientos hormonales y cirugías de afirmación de género a menores, en caso de que ofrezcan estos mismos servicios a individuos cisgénero. Esta medida se produce en un contexto de creciente tensión tras la firma de un decreto por parte del expresidente Donald Trump, que busca restringir estas intervenciones médicas.

La guía de Bonta se produce después de que el Hospital Infantil de Los Ángeles, uno de los principales proveedores de procedimientos de cambio de género en el país, anunciara que dejaría de aceptar nuevos pacientes menores de 19 años para tratamientos hormonales. La decisión se alinea con la nueva política federal que busca prohibir lo que se denomina "mutilación química y quirúrgica" en jóvenes estadounidenses.

La ley de California, incluyendo la Ley de Derechos Civiles de Unruh, prohíbe la discriminación por orientación sexual o identidad de género”, afirmó la oficina de Bonta. “Negarse a ofrecer servicios a un grupo de individuos basado en su estatus protegido, como es el caso de los individuos transgénero, es considerado discriminación”.

Implicaciones de la nueva guía del Fiscal General de California

La guía de Bonta subraya que las familias de California que buscan atención médica de afirmación de género, así como los profesionales de la salud que la proporcionan, están protegidos bajo las leyes estatales. A pesar de la decisión del Hospital Infantil de Los Ángeles de no aceptar nuevos pacientes, el hospital continuará administrando hormonas a los pacientes existentes menores de 19 años.

Además, la ley de California exige que las compañías de seguros cubran la atención de afirmación de género, un requisito que también se extiende a Medi-Cal, el programa de salud financiado por los contribuyentes. Sin embargo, la reciente orden ejecutiva de Trump podría cambiar esta situación, ya que busca eliminar la cobertura de atención de afirmación de género en programas de salud financiados federalmente.

Reacciones ante la orden ejecutiva de Donald Trump

La orden ejecutiva de Trump no solo prohíbe la financiación federal de instituciones que continúan realizando estas intervenciones, sino que también requiere la aplicación de leyes contra la mutilación genital femenina. En respuesta, Bonta se unió a una coalición de 23 fiscales generales estatales para demandar contra un amplio congelamiento de fondos federales, interpretando que la notificación del Departamento de Justicia de EE. UU. se aplica también a la orden ejecutiva de Trump.

La oficina de Bonta destacó que el DOJ ha afirmado que las agencias federales “no pueden pausar, congelar, impedir, bloquear, cancelar o terminar ningún premio u obligación en base al memorando de la OMB, o en base a los recientes decretos ejecutivos del Presidente”. Esto implica que la reciente orden ejecutiva sobre la atención de afirmación de género para menores no proporciona a las agencias federales ninguna base para amenazar o revocar la financiación federal de hospitales y proveedores de salud financiados por el gobierno.

Impacto en hospitales y atención médica de Estados Unidos

Según informes de CalMatters, algunos hospitales ya están perdiendo financiación federal para tratamientos transgénero, ya que las agencias federales suspenden o cancelan subvenciones y contratos en curso. Sin embargo, estos hospitales están preparando acciones legales para recuperar cualquier dinero perdido. La situación se presenta como un desafío significativo para la atención médica de los menores transgénero en California, en un momento en que la política y la salud se entrelazan de manera compleja.