Política

Conferencia Episcopal Peruana se pronuncia tras disolución del Sodalicio: "Expresamos nuestra solidaridad con las víctimas"

La organización católica se pronunció acerca de la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana, así como sobre la situación política y social que enfrenta el Perú.

Conferencia Episcopal Peruana brindó comunicado | Composición: LR.
Conferencia Episcopal Peruana brindó comunicado | Composición: LR.

La Conferencia Episcopal Peruana (CEP) emitió un comunicado dirigido al pueblo peruano en el que se pronunció sobre diversos temas. Esta institución católica destacó entre los principales puntos de su pronunciamiento la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana (SVC), confirmada por el papa Francisco. La CEP expresó su respaldo a los denunciantes de abusos físicos, psicológicos y sexuales perpetrados por miembros del Sodalicio.

"Expresamos nuestra solidaridad con las víctimas del Sodalicio de Vida Cristiana. Lamentamos profundamente que algo tan terrible haya ocurrido dentro de la Iglesia en el Perú. Agradecemos a quienes, con valentía y perseverancia, han hecho posible que los abusos sufridos salgan a la luz, lo que nos ha permitido a los obispos tomar conciencia de ellos. Compartimos el dolor de las víctimas y sus familias, y una vez más expresamos nuestro pesar a quienes no se han sentido debidamente acompañados por nosotros al desconocer las gestiones que esta Conferencia Episcopal ha venido realizando ante la Santa Sede desde hace varios años", señala el comunicado.

Cabe destacar que Monseñor García Camader, quien es nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, formó parte de la Comisión Ética para la Justicia y la Reconciliación. Dicha Comisión fue creada con el objetivo de "atender, confortar y aliviar a las víctimas del Sodalicio, contribuyendo al proceso de reparación y reconciliación", según se menciona en su página oficial.

 Comunicado de la Conferencia Episcopal Peruana | Fuente: CEP

Comunicado de la Conferencia Episcopal Peruana | Fuente: CEP

Democracia y educación: otros temas dentro del comunicado

Además de pronunciarse sobre la disolución del Sodalicio y expresar su apoyo a las víctimas de la organización fundada por Luis Figari, el comunicado de la Conferencia Episcopal abordó otros temas relacionados con la realidad nacional, como la situación económica, social y política del Perú.

La CEP señaló que la corrupción es uno de los principales factores que agravan la situación económica y social del país: "Como pastores que caminamos con el pueblo santo de Dios a lo largo y ancho del país, somos conscientes de la crisis multidimensional que afecta a nuestra nación. Las antiguas pobrezas aumentan ante la presencia de intereses egoístas, cuando no corruptos, en diversas esferas del Estado y de la sociedad civil. Cientos de miles de familias todavía no tienen acceso a una alimentación adecuada, atención médica o una educación escolar de calidad", detallaron.

Asimismo, los obispos peruanos advirtieron que la democracia en el Perú se ve debilitada por el desinterés ciudadano y el incremento de la criminalidad: "El debilitamiento de la democracia, la pérdida de institucionalidad y de valores, incluido el respeto por la vida y el cuidado de la creación, avanza de la mano con el desinterés por la política, el auge de economías ilegales y el crimen organizado. Los niveles de violencia e inseguridad ciudadana son alarmantes. La búsqueda del bien común se ve obstaculizada por la polarización, que se fomenta a través de redes sociales con una agresividad que atenta gravemente contra la dignidad de las personas", precisaron.

No hubo pronunciamiento sobre denuncia a Juan Luis Cipriani

A pesar de abordar diversos temas coyunturales del país, el comunicado omitió mencionar la reciente denuncia publicada por el diario El País de España contra el exarzobispo de Lima y miembro del Opus Dei, Juan Luis Cipriani. Según la información difundida por el medio, el denunciante afirmó haber sufrido abuso sexual por parte de Cipriani cuando era menor de edad. Ahora, con 58 años, decidió compartir su testimonio de manera anónima.

Tras la denuncia, Cipriani fue sancionado con la prohibición de portar hábitos, utilizar símbolos cardenalicios y participar en futuros cónclaves. En diciembre, el exarzobispo de Lima regresó al país y el 7 de enero fue condecorado con la medalla de la Orden al Mérito en el grado de Gran Cruz por el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, también miembro del Opus Dei. Durante el evento, Cipriani no portó sotana ni insignias que lo identificaran como cardenal.

El País informó que, cuando Cipriani cesó sus funciones en 2019, el Vaticano comunicó únicamente que el papa Francisco había aceptado su renuncia, presentada al cumplir los 75 años. Sin embargo, generó suspicacias la rapidez con la que se aceptó su dimisión, un proceso que generalmente se extiende salvo por problemas de salud u otras circunstancias graves. La verdadera razón, según la publicación, habría sido el presunto abuso sexual denunciado por un menor, quien en 2018 envió una carta al papa solicitando justicia. En su misiva, explicó que no buscaba venganza, sino que se tomaran medidas adecuadas contra Cipriani.