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James Boasberg: quién es el juez que busca impedir las deportaciones de Trump al bloquear la Ley de Enemigos Extranjeros

La controversia en torno a Boasberg no solo resalta su influencia en el sistema judicial, sino también la tensión entre el poder ejecutivo y el judicial en el contexto de las políticas migratorias de la administración de Donald Trump.

El juez James Boasberg frenó temporalmente las deportaciones de venezolanos en Estados Unidos. Foto: composición LR/The New York Times/EFE
El juez James Boasberg frenó temporalmente las deportaciones de venezolanos en Estados Unidos. Foto: composición LR/The New York Times/EFE

El juez James Boasberg se ha convertido en el centro de atención tras frenar temporalmente las deportaciones de venezolanos bajo la Ley de Enemigos Extranjeros. Su papel en este conflicto ha generado críticas y apoyo, reflejando la polarización política en Estados Unidos.

Nombrado por Barack Obama, Boasberg ha tenido una carrera judicial notable, destacándose por su imparcialidad y su enfoque en casos complejos. Su reciente decisión de bloquear temporalmente las deportaciones ha desatado la ira del expresidente Trump, quien lo ha calificado de "lunático radical de izquierda".

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¿Quién es James Boasberg y cuál es su papel en la justicia de EE.UU.?

James E. "Jeb" Boasberg nació en 1963 en San Francisco. Estudió Historia en Yale y Oxford, y Derecho en Yale, donde se graduó en 1990. Inició su carrera como asistente judicial en la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, luego trabajó en litigios privados y como fiscal federal adjunto en la Fiscalía del Distrito de Columbia. En 2002, fue nombrado juez asociado del Tribunal Superior del Distrito de Columbia por el presidente George W. Bush.

En 2011, el presidente Barack Obama lo nombró juez del Tribunal de Distrito de Columbia, donde fue confirmado por unanimidad. En 2023, Boasberg asumió el cargo de juez principal de este tribunal, uno de los más influyentes en Washington, destacando por su papel en casos relevantes como el bloqueo temporal a las políticas de deportación de Donald Trump.

Boasberg: relación con Trump y decisiones judiciales en USA

La relación entre James Boasberg y Donald Trump ha sido complicada, especialmente debido a las decisiones judiciales que Boasberg ha tomado en casos relacionados con el expresidente. En 2023, Boasberg ordenó que Mike Pence, exvicepresidente de Trump, testificara ante el gran jurado sobre sus conversaciones con Trump previas al asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021. Esta orden fue vista como un desafío directo a las estrategias legales de Trump, quien intentó bloquear el testimonio de su exvicepresidente en varias ocasiones.

Además, Boasberg, durante su tiempo en el Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA), fue un defensor de la transparencia, promoviendo la desclasificación de documentos cruciales relacionados con la investigación sobre la posible colusión entre la campaña de Trump y Rusia. Su postura sobre la desclasificación de información en casos sensibles ha generado tensiones, ya que, por un lado, ha apoyado el acceso público a datos relevantes para la seguridad nacional, pero, por otro, ha desafiado las acciones de la administración Trump en temas clave.

Boasberg y Trump: controversia sobre las deportaciones en EE.UU.

La reciente decisión de Boasberg de bloquear temporalmente las deportaciones de venezolanos ha sido objeto de críticas por parte de la Casa Blanca, que lo considera un intento de usurpar el poder presidencial. A pesar de su orden, los vuelos de deportación continuaron, lo que ha llevado a un nuevo plazo para que el Departamento de Justicia proporcione información sobre las deportaciones.

Las críticas de Trump hacia Boasberg han resonado en el Partido Republicano, donde algunos miembros han apoyado la idea de destituir al juez. Sin embargo, el presidente de la Corte Suprema, John Roberts, ha defendido la independencia judicial, señalando que la destitución no es una respuesta adecuada a desacuerdos sobre decisiones judiciales. La situación actual refleja la complejidad de las relaciones entre los poderes del Estado y la continua lucha por el control de las políticas migratorias en Estados Unidos.